El abastecimiento de armas ilegales es de tres millones de armas que el estado no controla.
Muchas de estas armas son secuestradas judicialmente, como prueba de algún delito, y el paso que seguiría seria su destrucción, pero algo falla en el medio y muchas pasan al mercado negro nuevamente.
Como ejemplo hoy en cualquier villa miseria se consigue una pistola 9 milimetros similar a la de la policía por 200 o 300 pesos y muchas veces se cambia por cocaína o paco.
Un FAL o M16 fusiles que utilizan la fuerzas armadas se consigue por 4000 pesos en el mercado negro, muchos vienen de cuarteles o de Ciudad del Este.
Lamentablemente este arsenal como granadas están en manos de la delicuencia, con este panorama es difícil creer que estamos cerca de una solución.
Hay una gran organizacion que provee de municiones y armas, dejemos de creer que son de particulares que fueron asaltados.
También es cierto que las armas se alquilan en villas de emergencia, para cometer diferentes atracos y luego se devuelven, una vez cometido los hechos.
Si no se toma urgente una medida, de cortar este flujo siniestro, es una guerra perdida, entiendo que este tema es una decisiòn cien por ciento política.
Y no hablo de ideologías, si no de firmeza a la hora de cuidar a la ciudadania, no creo que esto pase en Cuba o Venezuela y menos en China, sito estos casos porque son los mas afines al gobierno.
La seguridad es un tema de estado y no hay que temer el costo político, hay que cuidar al que trabaja y vive dignamente.
Y separar a estos descerebrados que matan, roban y violan a nuestros hijos.
La gente ya no aguanta mas, que esperan los gobernantes, que empiecen los casos de justicieros.
Espero que despierten y asomen sus cabezas a la calle y sientan el clamor popular de justicia.
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